¿Cuánta persistencia tienes ante los retos?
Permíteme contarte esta historia…
En el 1886, el primer año de la Coca-Cola, la famosa gaseosa que todos conocemos, sólo vendió 28 botellas.
Sin embargo, hoy se encuentra entre una de las más vendidas en el mercado. Porque parte de su éxito, fue gracias a la persistencia.
Por eso los hijos persistentes logran su cometido. Cuando desean algo, son tan insistentes que no paran de pedir hasta obtener lo que quieren.
Hay cosas que caracterizan al que triunfa, y una de ellas, es persistir.
Quizás en el camino aparecerán circunstancias difíciles que parecerán no llevarte hacia la dirección correcta, pero llegar al otro lado no se trata de paralizarte ante los problemas…
Se trata más bien de continuar, de persistir, y de confiar en que Dios te lleva por la ruta correcta.
Todo comienza contigo, porque maximizar nuestra vida está amarrado a cuánta fe y persistencia podemos tener hasta poder conquistar.
Por eso Job dijo: “¡Desnudo salí del vientre de mi madre y desnudó volveré allá!”
Jehová dio, Jehová quitó, ¡sea el nombre de Jehová bendito!
Las palabras de Job querían decir: “Yo no me quito, sea como sea que llegue al final, no dejaré de declarar el poder de mi Dios porque es Él quien está conmigo, y el que puede sacarme de esto…”
Nunca dudes del poder de Dios.
El mismo Pedro caminó sobre las aguas, pero por dudar, se hundió.
Práctica la iniciativa y toma riesgos así como Pedro, pero jamás dudes, y mucho menos dejes de persistir…
Nunca pienses que estás esperando por algo que nunca sucederá; persiste con una fe que sabes que sucederá el milagro.
Confía en Dios y confiesa que Jesucristo es el Todopoderoso, el hijo del Dios viviente…
¡No te rindas! Persiste, porque llegará…
Migadalia Rivera.